Necesidad social de quienes abandonan órdenes religiosas

En Asociación Extramuros somos conscientes de la situación de necesidad social que atraviesan quienes abandonan las órdenes religiosas. También de los problemas que tienen que hacer frente cuando desean reinsertarse en la vida social. Por ello, queremos explicarla y darla a conocer entre la población general. Pues es una realidad muy poco conocida y que requiere de la atención y los recursos, así como de la comprensión de todas las personas que les rodean. 

 

Necesidad social de quienes abandonan órdenes religiosas

Ante la situación de cambio vital drástico, la persona que abandona una orden religiosa se enfrenta a una situación no pensada. Y lo hace sin tener herramientas o recursos que le permitan afrontarlo de una manera segura o sosegada. Un hecho que se suma al difícil trance por el que ha pasado antes de salir de la institución. Es decir, a la culpabilización y connotación negativa de su persona; a la invisibilización y a la negación de sus dificultades; pero, sobre todo, a la acusación directa por parte de la institución de deslealtad y de falta de  comprensión.

A todo ello hay que sumar que la persona sufra una falta de apoyo por parte de las personas que, hasta entonces, han formado parte de sus apoyos. Lo que hace que quede completamente desprotegida.

Es importante tener en cuenta, para llegar a entender el alcance de esta situación, la estigmatización que viven como fruto de su decisión. Una adjetivación negativa a la que acompañan: la negación de otros recursos que faciliten su proceso de independencia desde el interior de la propia institución para la que ha estado trabajando hasta ese momento.

 

Una compleja reinserción

Después de la salida de la institución, la persona no lo tiene nada fácil. Sus carencias son graves y básicas. En este sentido, por ejemplo, hay que señalar que: no tiene hogar, que  tiene que hacer frente a graves dificultades para buscar recursos económicos con los que poder sobrevivir, profesionales para poder ser independiente, o medios sociales que faciliten su desarrollo personal. 

Incluso tiene que hacer frente a complicadas situaciones familiares que, en muchos casos, no aceptan o entienden por qué ha tomado esa decisión.

Esta persona debe, pues, aprender a hacer cualquier gestión, por cotidiana que resulte. Acciones tan normalizadas como:

  • El afrontamiento de tramitaciones necesarias para instalarse en una vida normalizada.
  • El acceso al funcionamiento digital.
  • El rechazo de la familia y otras personas conocidas. 
  • El reconocimiento de su imagen personal.
  • La ausencia de esquema corporal, así como de la imagen de habilidades y capacidades, autoestima y expectativa de sus capacidades.
  • La necesidad de desprogramación de ideas negativas sobre él o ella misma; así como sobre el acto de dejar la institución.

 

Emergencias localizadas por Asociación Extramuros

A partir de todo esto, desde la Asociación Extramuros hemos observado condiciones que provocan síntomas psicológicos y psiquiátricos en la salud de estas personas. Hechos que requieren atención especializada, servicio que ofrecemos desde nuestra entidad y que se concretan en lo siguiente:

  1. Ansiedad reactiva a cambios vitales sin alternativa viable sobre todo durante los primeros meses.
  2. Síntomas depresivos que invalidan a la persona y la paralizan, con pensamientos negativos incluidos ideas de muerte o suicidio. 
  3. Trastorno de estrés postraumático con síntomas de evitación, reactividad fisiológica, flash back de situaciones asociadas al trauma, ausencia de respuesta con desrealización y disociación. 
  4. Alteraciones del sueño con deterioro del rendimiento y afrontamiento de tareas cotidianas. 

 

Todo ello es el detonante de otras patologías no manifestadas como los trastornos obsesivo-compulsivos, los trastornos por somatización, los de tipo bipolar, etc.

Procesos sintomáticos o que implican reacciones patológicas que son muy amplios y que cuentan con elementos específicos de la población atendida. De ahí que desde nuestra asociación consideremos la necesidad de ofrecer un abordaje terapéutico que evite la patologización posterior y que permita  la recuperación de la persona para una reinserción normalizada. 

 

Objetivos y resultados previstos de la labor de Extramuros

El objetivo final de nuestra labor es, por tanto, la normalización de la persona que abandona la orden religiosa e implica el abordaje terapéutico en su totalidad. Es decir, la valoración de la capacidad de afrontamiento y recursos con los que cuenta la persona; la evaluación psicológica sobre los síntomas que presenta, pensamientos negativos, estilos de abordaje no eficaces, y otros rasgos que perjudiquen la evolución de la persona.

En este sentido, desde Asociación Extramuros facilitamos la elección de tratamiento psicoterapéutico reglado, de asesoramiento psicológico, de poder seguir distintas opciones de terapia de grupo, así como de otras modalidades terapéuticas adecuadas a la situación que presenta la persona. Y todo ello lo hacemos pretendiendo conseguir lo siguiente: 

  1. La capacitación personal necesaria para el afrontamiento de la vida cotidiana, adaptación e inserción social. 
  2. Que la persona supere miedos que le impiden afrontar una nueva vida a la que se enfrenta.
  3. Conseguir sensación de familia, protección y seguridad personal que le permitan afrontar su situación actual.
  4. Recuperar la capacidad para el conocimiento del mundo laboral acorde con sus estudios y capacidades respecto de la inserción laboral.

 

De ahí que hablemos de necesidad social en estos casos y de que necesitemos ayuda de todas las personas que deseen darle una segunda oportunidad al prójimo. Por ello, si quieres ser parte del cambio, ponte en contacto con nosotros y colabora. Te estamos esperando.

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